En un hospital del municipio de Caldas, sur del valle de Aburrá, fue capturado un joven de 18 años, señalado de haber asesinado a una menor de 13 años en el municipio de Amagá (Suroeste) y haber herido a la madre de la niña.
El coronel Carlos Mauricio Sierra, comandante de la Policía Antioquia, explicó que en el momento de la captura, el sujeto estaba consumiendo sustancias alucinógenas. Al intentar escapar, recibió varias heridas en los brazos por lo que tuvo que ser llevado a un centro asistencial donde se legalizó su detención.
Por su parte, Victoria Eugenia Ramírez, secretaria de Gobierno de Antioquia, resaltó la colaboración ciudadana que permitió dar con el paradero del presunto agresor.
“Cinco personas llamaron a brindar información y tras los trabajos de verificación por parte de las autoridades, a tres de ellas se les entregará la recompensa ofrecida por la Gobernación de Antioquia, que era de 10 millones de pesos”.
De igual forma, informó que en Amagá se realizó una marcha de más de 300 en contra de este tipo de agresiones. En dicho municipio, según el alcalde Wilser Darío Molina, este año se han registrado 10 asesinatos, de los cuales, siete son por microtráfico. El de la menor de edad, es el primer caso de homicidio en contra de una mujer y una menor edad.
El joven estaba completamente obsesionado con la menor y no era la primera vez que intentaba algo en contra de ella
De otro lado, según las investigaciones en labores de inteligencia de la Policía, “el individuo pretendía a la menor de edad. Entró por la parte de atrás de la casa y cuando pretendía accederla carnalmente la niña comienza a gritar a lo que llega la madre y el sujeto le causa más de 14 heridas a la madre con arma blanca y luego también agrede a la menor causándole la muerte”, explicó el coronel Sierra.
La madre, quien identificó al presunto agresor, se encuentra en observación médica pero está estable y se recupera de sus heridas.
El capturado, pór su parte, fue dejado a disposición de las autoridades competentes para las respectivas diligencias judiciales. Por el crimen, en caso de ser declarado culpable, podría pagar una condena entre 25 y 30 años.
ELTIEMPO